EE.UU. congela parte de la financiación de la misión de la ONU contra pandillas en Haití

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By Isabel Gutierrez

El gobierno de Estados Unidos notificó a la Organización de las Naciones Unidas sobre el congelamiento de parte de los fondos destinados a la misión multinacional en Haití, cuyo objetivo es combatir las pandillas que intentan tomar el control de la capital del país. La información fue confirmada por la ONU este martes, 4, destacando que el cambio tendrá un impacto inmediato en las operaciones.

La misión, liderada por policías de Kenia, ya enfrentaba dificultades debido a la falta de recursos y personal. El gobierno estadounidense era el principal financiador de la fuerza de intervención, pero la decisión de Donald Trump de imponer un bloqueo general a la asistencia externa llevó a la paralización de programas en varias partes del mundo, afectando directamente las operaciones en Haití.

Bloqueo de recursos de la ONU

El portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, informó que Estados Unidos se había comprometido a contribuir con 15 millones de dólares al fondo fiduciario que financia la misión. Sin embargo, de ese total, solo se habían utilizado 1,7 millones antes de la decisión de congelamiento, dejando 13,3 millones retenidos.

El recorte tomó por sorpresa a los líderes de la misión en Haití, que ya operaba con un presupuesto reducido. El fondo total disponible para la misión es de menos de 100 millones de dólares, mientras que las estimaciones indican que se necesitan aproximadamente 600 millones de dólares al año para mantener las operaciones.

A pesar del bloqueo, el Departamento de Estado de EE.UU. concedió una exención para liberar 41 millones de dólares para la misión, y otros pedidos de exención, que suman más de 30 millones de dólares, aún están pendientes. Sin embargo, la incertidumbre sobre la financiación amenaza la continuidad de la operación.

La decisión de EE.UU. llega en un momento crítico para Haití, donde la violencia de las pandillas se ha intensificado. Según la ONU, estos grupos criminales ya controlan el 85% de la capital, Puerto Príncipe. Solo en el último año, más de 5.600 personas fueron asesinadas y más de un millón quedaron sin hogar debido a la violencia.

El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió recientemente que, sin apoyo adicional a la misión internacional, las pandillas podrían tomar el control total de la capital haitiana. La semana pasada, un ataque violento perpetrado por cientos de miembros de pandillas en un barrio de alto nivel de la ciudad dejó al menos 40 muertos.

El contingente de la misión cuenta actualmente con unos 600 policías de Kenia, además de soldados y agentes de seguridad de países como El Salvador, Jamaica y Guatemala. Sin embargo, la falta de recursos podría obstaculizar los esfuerzos para transformar la operación en una misión oficial de paz de la ONU, lo que dificultaría aún más contener la violencia en el país.

El impacto del congelamiento de la ayuda estadounidense

Expertos advierten que la retirada del apoyo financiero de EE.UU. podría debilitar aún más la misión en Haití, que ya enfrenta dificultades operativas. Michael Deibert, autor de libros sobre la crisis haitiana, afirmó que la misión ya tenía un personal reducido y que la retirada de la financiación hará que el trabajo de las fuerzas de seguridad en el país sea aún más difícil.

Jake Johnston, investigador del Centro de Investigación Económica y Política, destacó que la ausencia de financiación de EE.UU. podría obligar al gobierno haitiano a asumir un papel más activo en la lucha contra las pandillas. Sin embargo, existen dudas sobre la capacidad de la administración haitiana para hacer frente a la crisis sin apoyo externo.

El congelamiento de la ayuda también afecta otros programas humanitarios en Haití. Según Johnston, aproximadamente 330 millones de dólares en compromisos han sido suspendidos, incluyendo proyectos de tratamiento del VIH/SIDA. Subrayó que pocos países en el mundo dependen tanto de la asistencia extranjera de EE.UU. como Haití, y que esta decisión podría agravar aún más la crisis en el país.

Ante este escenario, la ONU espera nuevas directrices del gobierno estadounidense sobre el destino de los recursos ya prometidos, mientras la misión en Haití enfrenta un futuro incierto.