El fiscal nacional de Chile, Ángel Valencia, confirmó este jueves que un testigo clave en la investigación sobre el secuestro y asesinato del exteniente venezolano Ronald Ojeda declaró que la orden y el pago del crimen provinieron de Diosdado Cabello Rondón, ministro del Interior y Justicia de Venezuela y figura clave del chavismo. Según el testimonio, el encargo se hizo al líder de la organización criminal Tren de Aragua, Héctor Guerrero Flores, conocido como el “Niño Guerrero”.
En una entrevista con T13 Radio, Valencia explicó que el fiscal regional Héctor Barros le ratificó que “tres personas han declarado en la investigación atribuyendo la autoría del crimen a autoridades del Gobierno venezolano”. De esas tres, una identificó directamente a Diosdado Cabello como responsable del pago y la orden del secuestro, mientras que las otras dos mencionaron a funcionarios del gobierno sin especificar nombres.
El fiscal Valencia señaló que la investigación sigue en curso, pero que ya existen “antecedentes muy sólidos” que confirman que se trató de un secuestro y homicidio por encargo. En un reportaje emitido por Chilevisión, se conoció parte de la declaración del testigo que acusa a Cabello:
“Se me dijo que Diosdado Cabello, un político venezolano, dio la instrucción del secuestro a través del Niño Guerrero, quien gestionó el pago”.
Reacción del Gobierno de Chile
El gobierno chileno, encabezado por Gabriel Boric, ha tomado en serio las nuevas revelaciones. La ministra del Interior, Carolina Tohá, afirmó que estos antecedentes son de “enorme gravedad” y que, si la investigación confirma la implicación de funcionarios venezolanos, se tomarán medidas al respecto. “Si esta investigación continúa en la misma dirección, ciertamente habrá muchas decisiones que tomar”, indicó.
Tohá adelantó que, en caso de confirmarse la participación del régimen venezolano, Chile podría recurrir a la Corte Penal Internacional, además de adoptar otras acciones diplomáticas y legales.
Ronald Ojeda, de 32 años y opositor al chavismo, fue secuestrado el 21 de febrero en su domicilio en Santiago de Chile. Un grupo de hombres encapuchados y vestidos con falsos uniformes de la Policía de Investigaciones (PDI) irrumpió en su apartamento, llevándoselo sin exigir rescate. Su cuerpo apareció diez días después dentro de una maleta, enterrado en un asentamiento ilegal en la comuna de Maipú.
Hasta ahora, han sido detenidos varios sospechosos, incluido un joven de 17 años ya condenado a cinco años de reclusión, Maickel Villegas, extraditado desde Costa Rica, y Julio Iglesias, capturado recientemente en un operativo en Santiago que desmanteló una célula del Tren de Aragua.
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, solicitó la extradición de los miembros del Tren de Aragua arrestados en Chile para que sean procesados en Venezuela y enfrenten penas de hasta 30 años de prisión. Sin embargo, la ministra Tohá afirmó que Chile tomará las decisiones necesarias para garantizar que los delitos ocurridos en su territorio sean juzgados dentro del país.