Una jueza de Perú rechazó este miércoles una solicitud de la Fiscalía para impedir que la expresidenta Dina Boluarte abandone el país, mientras avanza una investigación en su contra por supuestos delitos de abuso de autoridad y lavado de activos.
Un fallo que mantiene en libertad a una líder impopular
La decisión fue tomada por el juez Fernando Valdez, quien consideró que Boluarte no representa riesgo de fuga y calificó la solicitud fiscal como “infundada”. La exmandataria, destituida por el Congreso la semana pasada, ha negado cualquier irregularidad.
Boluarte dejó el cargo con una popularidad extremadamente baja, entre 2% y 4%, en medio de un clima de creciente violencia e inseguridad. Durante su gestión, el país vivió protestas de transportistas y jóvenes contra el aumento de las extorsiones y homicidios.
Según la Fiscalía, la exlíder habría recibido dinero de una organización criminal y favorecido la designación de funcionarios de salud relacionados con la rinoplastia que se realizó en 2023, período en el que habría abandonado sus funciones durante dos semanas sin notificar al Congreso.
Además, enfrenta acusaciones por presunta corrupción vinculadas al origen de su colección de relojes de lujo Rolex, así como por el uso excesivo de la fuerza durante las protestas que estallaron tras la destitución de su antecesor.
La noche de su salida del poder, manifestantes se congregaron frente a la embajada de Ecuador en Lima, ante rumores de que podría solicitar asilo político.
Perú vive un ciclo de inestabilidad política que parece no tener fin: el país ha tenido siete presidentes en los últimos siete años, tres de ellos actualmente en prisión, mientras más de la mitad de los congresistas enfrentan investigaciones por corrupción.