Noboa y González se enfrentarán en la segunda vuelta presidencial en Ecuador

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By Isabel Gutierrez

Ecuador elegirá a su próximo presidente en una segunda vuelta electoral después de que el actual mandatario conservador, Daniel Noboa, y la abogada de izquierda, Luisa González, obtuvieran suficientes votos el domingo para superar a los otros 14 candidatos.

El balotaje, programado para el 13 de abril, será una repetición de las elecciones anticipadas de octubre de 2023, que otorgaron a Noboa un mandato presidencial de 16 meses.

Ahora, Noboa y González compiten por un mandato completo de cuatro años, prometiendo a los votantes reducir la actividad criminal que ha alterado sus vidas en los últimos cuatro años. El aumento de la violencia en el país sudamericano está vinculado al tráfico de cocaína producida en Colombia y Perú. Para muchos votantes, ser víctimas del crimen se ha convertido en un factor decisivo al momento de elegir si un tercer presidente en cuatro años puede cambiar el rumbo de Ecuador o si Noboa merece más tiempo en el cargo.

Según cifras publicadas por el Consejo Nacional Electoral de Ecuador, con el 80% de los votos escrutados, Noboa recibió más de 3,71 millones de votos (44,43%), mientras que González obtuvo más de 3,69 millones de votos (44,17%). Los otros 14 candidatos quedaron muy rezagados.

El voto es obligatorio en Ecuador, y las autoridades electorales informaron que más del 83% de los aproximadamente 13,7 millones de votantes habilitados acudieron a las urnas.

Crimen, pandillas y extorsión

Durante la administración de Noboa, la tasa de homicidios disminuyó de 46,18 por cada 100.000 habitantes en 2023 a 38,76 en 2024. Sin embargo, esta cifra sigue siendo significativamente más alta que los 6,85 por cada 100.000 registrados en 2019. Otros delitos, como el secuestro y la extorsión, se han disparado, generando temor entre la población.

“Para mí, este presidente es desastroso”, dijo Marta Barres, de 35 años, quien acudió al centro de votación con sus tres hijos adolescentes. “¿Puede cambiar las cosas en cuatro años más? No. No ha hecho nada”. Barres, que paga 25 dólares al mes a una pandilla local para evitar ser acosada o algo peor, afirmó que apoya a González porque cree que puede reducir el crimen en general y mejorar la economía.

Noboa derrotó a González en la segunda vuelta de octubre de 2023, en una elección anticipada provocada por la decisión del entonces presidente Guillermo Lasso de disolver la Asamblea Nacional y acortar su propio mandato. Tanto Noboa como González, discípula del expresidente Rafael Correa, habían tenido breves períodos como legisladores antes de lanzar sus campañas presidenciales ese año.

Para ganar en primera vuelta el domingo, un candidato necesitaba obtener el 50% de los votos o al menos el 40% con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo.

Noboa y sus tácticas cuestionadas

Noboa, de 37 años, heredero de una fortuna construida en el comercio bananero, fundó una empresa de organización de eventos a los 18 años y luego se unió a la Corporación Noboa de su padre, donde ocupó cargos de gestión en áreas de transporte marítimo, logística y comercio. Su carrera política comenzó en 2021, cuando ganó un escaño en la Asamblea Nacional y presidió la Comisión de Desarrollo Económico.

Como presidente durante los últimos 15 meses, algunas de sus tácticas de mano dura para reducir el crimen han sido objeto de escrutinio dentro y fuera del país por poner a prueba los límites de las leyes y normas de gobierno. Entre sus acciones más cuestionadas está la declaración de conflicto armado interno en enero de 2024, que permitió la movilización militar en zonas controladas por el crimen organizado, así como la polémica aprobación de una redada policial en la embajada de México en Quito para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas, un condenado por corrupción que se refugiaba allí.

A pesar de las críticas, su enfoque directo también le ha sumado apoyo. “Noboa es la única persona que está golpeando duro al crimen organizado”, dijo el jubilado Germán Rizzo, quien votó por la reelección del presidente, afuera de un centro de votación en Samborondón, una zona de clase alta separada de Guayaquil por un río.

El ascenso de González

Luisa González, de 47 años, ocupó varios cargos gubernamentales durante la presidencia de Rafael Correa, quien lideró Ecuador entre 2007 y 2017 con políticas sociales de alto gasto y un enfoque cada vez más autoritario en sus últimos años de mandato. Correa fue condenado en ausencia en 2020 por un escándalo de corrupción.

González fue legisladora desde 2021 hasta mayo de 2023, cuando Lasso disolvió la Asamblea Nacional. Era poco conocida por los votantes hasta que el partido de Correa la eligió como su candidata presidencial para las elecciones anticipadas.

Según la profesora María Cristina Bayas, de la Universidad de las Américas en Quito, el resultado del domingo fue “un triunfo” para el partido de Correa, ya que las encuestas preelectorales proyectaban una diferencia más amplia entre Noboa y González.

Esteban Ron, decano de la Facultad de Ciencias Sociales y Jurídicas de la Universidad Internacional SEK en Quito, afirmó que Noboa deberá reestructurar su campaña ante el riesgo de haber alcanzado ya su techo electoral. Ron atribuyó el resultado a los problemas que Noboa enfrentó durante su administración.

Esperando su turno para votar en Guayaquil, la estudiante de arquitectura Keila Torres dijo que aún no había decidido por quién votar. Según ella, ninguno de los candidatos podrá reducir el crimen en Ecuador debido a la corrupción gubernamental profundamente arraigada. “Si pudiera, no estaría aquí”, comentó Torres, quien fue testigo de tres asaltos en autobuses públicos en los últimos cuatro años y escapó por poco de un intento de robo de auto en diciembre. “Las cosas no van a cambiar”.

Este artículo se basa en la cobertura original de AP News